jueves, 31 de marzo de 2011

Mitos y realidades del HTML 5


Por JEFF WHATCOTT (BRIGHTCOVE)

Muchas son las expectativas respecto a las aportaciones del estándar HTML 5 a las experiencias interactivas online para el usuario. Pero, a la vez, existe cierta inquietud respecto a su situación actual: qué navegadores requerirán qué codecs o cómo se podrán probar las inversiones en sus medios online en el futuro. ¿Eliminará el HTML 5 el Flash o los plug-ins? ¿Estará preparado para soportar picos de máxima audiencia?

La proliferación y acceso en Internet a contenidos ricos e interactivos nos ha llevado a un punto de transición similar al de los estándares W3C, respecto al lenguaje de expresión básico de contenido en la web.

Según los datos del Cisco Visual Network Index, el tráfico global de vídeo por internet superará al tráfico global P2P en 2014. De hecho, ya supone un 51% del total del tráfico online de Estados Unidos. Además, la adopción de la navegación a través de dispositivos móviles se encuentra en pleno auge y el vídeo supone una gran parte de esa actividad.

Según ComScore, más del 35% de los usuarios móviles en Estados Unidos han usado su navegador móvil y Bytemobile apunta que, actualmente, uno de cada diez usuarios móviles visualiza vídeo a través de sus dispositivos. De hecho, los contenidos de vídeo crecerán un 60% del total de volumen de la red de datos.

Por otro lado, los smartphones han ganado relevancia, pero el mercado se encuentra fragmentado, con sistemas operativos como iOS y Android casi a la par, con un 25% y un 26% de cuota respectivamente (conScore Nov. 2010). Ambos soportan entornos de reproducción distintos: mientras que Android soporta Flash, el iPhone y el iPad sólo soportan codecs H.264 con ampliación a HTML5.

Estos hechos muestran cómo ha cambiado y madurado el contenido en la web desde el HTML estático de la segunda mitad de la década los 90 a las nuevas herramientas y plug-ins actuales. Ahora, la ubicuidad y la navegación móvil son el motor principal para la evolución de los estándares en todo lo relativo a soportar experiencias multimedia satisfactorias.

Si has leído hasta aquí, ya tienes noción de cuáles son las limitaciones actuales y potenciales del estándar HTML 5. Sin embargo, también existen una serie de mitos surgidos alrededor del mismo que me gustaría poder analizar.

Adiós al Flash
El HTML 5 va a acabar con el Flash y los plug-ins. Esto es pura ficción. La realidad es que los estándares del HTML5 se han diseñado para integrar los diferentes tipos de medios que ha soportado Flash en la última década. La fragmentación alrededor de los códecs y los contenedores estándar para vídeo de los navegadores contribuirán a que muchos sean los que sigan utilizando experiencias Flash “que funcionan en casi todas partes”.

El vídeo HTML 5 está preparado para prime time. Bueno, esto es cierto para las reproducciones básicas. Sin embargo para las experiencias de vídeo más sofisticadas y avanzadas, todavía queda camino por delante para poder equiparar HTML 5 con Flash.

La compatibilidad del iPad es la misma que la del HTML 5. En realidad, para que el iPad sea compatible con el vídeo en web (aplicaciones no nativas), necesita el códec H.264 expresado en HTML 5. Si tienes este códec, puedes reproducir contenidos de vídeo en cualquier dispositivo iOS. Aún así, el códec H.264 no se reproducirá por sí solo en Firefox o Chrome.

Por esta razón, la reproducción en iPad no equivale necesariamente a una completa compatibilidad con el vídeo en HTML5, te encuentras sólo a medio camino si no has soportado WebM/Ogg para otras experiencias de reproducción de código abierto en el navegador.

HTML 5 tiene que ver, fundamentalmente, con vídeo. Aunque esté particularmente ligado a la reproducción de vídeo, en realidad la actualización del estándar tiene más que ver con poder englobar cualquier tipo de experiencia multimedia sin la necesidad de plug-ins.

Esta es la razón por la cual HTML 5 incluye además de la etiqueta de 'video tabindex="0"', también las de 'audio' y 'canvas', y soporta comportamientos interactivos como arrastrar y soltar.

Por todo el ello, el HTML 5 supone un gran avance en la historia del contenido multimedia en la web y ha venido para quedarse, aunque todavía quede camino por delante.

Del mismo modo, la plataforma Flash soporta actualmente interacciones e integraciones más avanzadas y maduras. Por eso consideramos importante para los propietarios de sitios web el poder desarrollar una estrategia que haga posible el uso de ambos enfoques.

No hay comentarios:

Publicar un comentario