miércoles, 6 de octubre de 2010

Redes Sociales: Tiempo de hacer dinero

Dirigir una empresa de Internet es profesión de alto riesgo. Tan fugaces son las subidas como los descensos. En apenas 24 horas han cambiado los directores generales de la primera red social española, Tuenti, de la red de microblogs Twitter y de la telefonía gratuita, y en ese sentido también social, Skype. En los tres casos, una moraleja: el que manda es el inversor. Koro Castellano, directora general de Tuenti, ha durado un año; Evan Williams, dos años en Twitter; Josh Silverman, otros dos años en Skype; aunque el récord lo tiene Van Natta: ocho meses en MySpace.
El proceso no es nuevo. Se repite una y otra vez casi en las mismas circunstancias temporales: cuando la pujante start up necesita transformar su éxito popular en dinero. Es el caso de Castellano, que saltó de Unidad Editorial a Tuenti, con el objetivo de transformar las ideas para conseguir visitas (ocho millones de perfiles) en ideas para hacer negocio. Su fichaje fue explicado por el fundador y máximo directivo, Zaryn Dentzel, como el momento "de afrontar nuevos retos y asumir un proceso de madurez para garantizar el éxito futuro de la compañía".

Dos meses después de que Tuenti fuera adquirida por Telefónica (70 millones de euros por el 90% de las acciones), Castellano ha sido cesada. Sobre su marcha, un portavoz de Telefónica se ha limitado a asegurar que, tal como anunció cuando tomó la mayoría del capital, Tuenti es una inversión financiera y que, por tanto, no interviene en su gestión.

El relevo de Castellano coincide en el tiempo con la sustitución del cofundador y jefe de Twitter, Evan Williams. En su hoja de servicios solo puede presentar éxitos, pero Twitter ya necesita a otra persona, aquella que sepa convencer a los financieros de que su juvenil start up puede ser un gran negocio en bolsa. Antes ocurrió con Google, incluso con eBay y Meg Whitman. También Zuckerberg tuvo que fichar a Sheryl Sandberg, una ejecutiva de Google, para asentar su red social. En todos los casos se busca a un gestor con experiencia, con buena entrada en los círculos financieros y, por supuesto, de acuerdo con las empresas de capital riesgo que controlan la start up.

Es la segunda oleada de directivos de la empresa. Al ciclo de la creación le sigue el de la madurez, cuando la misión del ejecutivo es preparar la exitosa salida a bolsa. Normalmente se compatibilizan sus personalidades: la imaginación del creador de la empresa, y la disciplina contable del nuevo gestor.

En Google, Larry Page y Sergei Brin tuvieron que contratar a un veterano como Eric Schmidt, para que su salida a bolsa fuera creíble ante los tiburones de Wall Street. "No hagas el mal", puede ser un buen eslogan para atraer fieles, pero como gancho financiero dejaba que desear. Schmidt sí convenció a los inversores de que Google sería un gran negocio.

El cofundador de Twitter,Williams ha estado dos años en el puesto de director general. Su éxito no deja lugar a dudas: de 20 empleados a 300, de tres millones de personas registradas a 160 millones, de 1,25 millones de mensajitos diarios a 90 millones. Solo él tienen más de un millón de seguidores personales en su red. Tales éxitos tienen un pero: la falta de ingresos.

Twitter, como Facebook, siguen adelante gracias al apoyo financiero de las sociedades de capital riesgo, que quieren ver cuanto antes sus plusvalías, y eso pasar por salir a bolsa en cuanto escampe la crisis, nunca antes de 2012; ese será el trabajo de Dick Costolo, avezado vendedor de start ups (colocó FeedBurner a Google por 100 millones de dólares).

El mismo día un vicepresidente de Cisco, Tony Bates, ha sustituído en la dirección de Skype a Joshua Silverman. Esta telefonía gratuita -y como tal se le podría considerar telefonía social-, ya ha anunciado su salida a bolsa, pese a ello tiene un par de importantes novios que podrían abortar la operación: Cisco y Facebook. Sin embargo, Skype tiene un importante acuerdo tecnológico con Avaya, competidor de Cisco.

El ciclo vital de algunas de las empresas nacidas y crecidas por y para Internet, tras su creación y formación, tiene una tercera fase, el de la descomposición de la cúpula, cuando huyen directivos con la misma rapidez con que entraron. Es el caso del buscador Yahoo y de la antaño exitosa red social MySpace, donde su último director general no pasó de ocho meses.

No hay comentarios:

Publicar un comentario