Internet se está convirtiendo en el estándar para todas las telecomunicaciones; los servicios de voz sobre IP y la televisión de Protocolo de Internet están imponiéndose sobre las tecnologías especialmente diseñadas para los teléfonos y los televisores. Sin embargo los protocolos subyacentes de Internet hacen suposiciones sobre las conexiones físicas que no siempre encajan bien con las comunicaciones inalámbricas: que todos los enlaces son generalmente los mismos y proporcionan conectividad casi en tiempo real desde un extremo de la conexión al otra. Los servicios inalámbricos son a menudo intermitentes, varían mucho en la cantidad de ancho de banda que ofrecen y, sobre todo en el caso de los servicios por satélite, pueden sufrir retrasos, haciendo que los sitios web respondan lentamente ante los clics. Al tiempo que la aparición de nuevas aplicaciones exige nuevas demandas en las redes basadas en Internet, "quizá tenga más sentido considerar arquitecturas radicalmente diferentes", afirma Preston Marshall, director de la división de redes inalámbricas en el Instituto de Ciencias de la Información de la Universidad de California del Sur y ex gerente de muchos de los programas de tecnología inalámbrica avanzada en la DARPA (Defense Advanced Research Projects Agency).
Este tipo de pensamiento se aplica a esfuerzos para integrar tecnologías como las redes tolerantes al retraso (DTN) con protocolos de Internet. Puesto que las DTN permiten la comunicación incluso cuando el establecimiento de un vínculo de extremo a extremo es imposible, harían que las redes fueran más robustas. También son muy adecuadas para aplicaciones tales como la comunicación de máquina a máquina. Por ejemplo, un medidor en una red eléctrica "inteligente" podría necesitar intercambiar sólo pequeñas cantidades de datos con la compañía de electricidad dentro de una ventana de tiempo relativamente amplia; no es necesario usar una conexión de gran ancho de banda en tiempo real.
Más allá de las DTN, en última instancia, podría ser posible cambiar entre los diferentes tipos de enlaces inalámbricos de un momento a otro, dependiendo del tipo de datos a los que haya que acceder. Un usuario podría buscar un título de una película con una conexión móvil de bajo retraso, pero de bajo ancho de banda, y descargar la película mediante una conexión vía satélite de gran retraso y de banda ancha.
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