El lanzamiento de una startup siempre es una tarea delicada. Se trata de poner en marcha un negocio que todo el camino por delante para introducirse en su sector y consolidarse en el mercado. Para ello cuenta con ideas y generalmente una inversión limitada. Pero hay otros factores que pueden determinar el éxito un proyecto de este estilo, como el posicionamiento ético que tome la compañía desde un principio.
A la hora de entrar en el mercado con una startup hay una serie de recomendaciones que viene bien tener en cuenta. Uno de los pilares que es necesario tener claro es el control de la información y llevar a cabo una buena política en este sentido. Sin embargo, existen muchos otros consejos, algunos de ellos repletos de sentido común, como vigilar el flujo efectivo de capital, señalar claramente unos objetivos y recoger el feedback de los clientes para mejorar nuestro negocio.
Otros detalles a tener en cuenta para no terminar con nuestra startup antes de tiempo consisten en considerar diferentes fuentes de potencia competitiva o tener un plan para destacar entre el ruido del mercado, para así lograr llegar a los posibles clientes. La dedicación de tiempo y esfuerzo a seleccionar y probar un modelo de negocio, estando abiertos a cambios según la experiencia, es un elemento de valor añadido.
Sin embargo, existen otros factores de importancia, en concreto, desde el blog de Forbes, Martin Zwilling ofrece siete consejos para lanzar un proyecto éticamente sólido:
- Comunicar tus valores y objetivos empresariales: La startup debe defender unos valores centrales claros y tener unas metas definidas. Para que la comunicación sea efectiva ésta tiene que ser en las dos direcciones y lo anterior debe estar en mente de todos.
- Identificar la empresa con tus valores y objetivos: Asegurarse de que todo el mundo se identifica con los valores de la compañía y está centrado en alcanzar las metas.
- Gestionar las prioridades a corto y largo plazo: Las startups tienen que conocer cuáles son sus prioridades y guardar un equilibrio entre las mismas.
- Hacer un esfuerzo para adoptar los estándares de la industria: Cumplir la ley y no esperar a regulaciones puntuales para arreglar problemas que tengan que ver con el mundo legal. Además de respetar las normas para los empleados y cumplir con las responsabilidades sociales.
- Crear un equipo de trabajo ganador: Esto es imprescindible para toda compañía y más para una startup. Crear un grupo que trabaje bien y lo haga a gusto requiere comunicación constante, motivación, reconocimiento y un continuo aprendizaje.
- Ponerse en la perspectiva del cliente: El emprendedor tiene que tener clara la visión de los clientes hacia la empresa y debe conocer la importancia de cada elemento de su compañía.
- Mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal: Todos somos personas y no dependemos exclusivamente del trabajo, con lo que éste también se ve influido por el resto de aspectos de nuestra vida.
Para saber más de cómo lanzar una startup basada en sólidos pilares éticos consulta el artículo de Forbes.
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